La armadora coreana busca adaptarse lo más rápido posible a la cultura mexicana, particularmente a la de Nuevo León, en donde ya tiene prácticamente lista la planta de autos ligeros más grande de la región Norte de México y la primera de la entidad que iniciará operaciones este 16 de mayo para producir los primeros modelos Forte.
El DESAFÍO, KIA ha vivido toda una odisea, no sólo para edificar la planta armadora más rápida en su historia, que construyó en un año y medio, sino también para convertirse en un hito en lo referente a la llegada de inversión extranjera hacia Nuevo León y México, ya que desde ahora nadie duda que en este rubro, existe un antes y un después de KIA.
Víctor Alemán, gerente de Relaciones Públicas de KIA, destaca que la planta fue construida en un tiempo récord, que el inicio de las operaciones está programado para el próximo 16 de mayo y la inauguración para el 17 de septiembre entrante.
“Aún y cuando fueron épocas de lluvia, la construcción no se detuvo y se terminó para hacer el arranque de pruebas de producción en octubre de 2015, y en simultáneo se construían los accesos para un bulevar hacia todo el complejo de la planta y sus proveedores, fueron en total 16 meses, incluyendo los 13 de la obra civil, aunque se pudo terminar antes”, explicó.